Esta semana tuve la maravillosa oportunidad de asistir Colombiatex, la feria de textiles organizada todos los años por Inexmoda en Medellín. Es una feria enorme, complicada de descifrar y tal vez más desordenada de lo que esperaba. Grandes pabellones se llenan con cientos (¿miles?) de expositores y visitantes de una cantidad de países difícil de calcular… y a veces son tantos que parece imposible navegar los espacios de la feria. Pero a pesar de los problemas, tal vez la gran ventaja de Colombiatex es que logra poner en contacto a los actores (grandes y no tanto) de la industria colombiana con un mercado global.

En su descripción de la feria, Inexmoda asegura que:

Colombiatex de las Américas es la muestra comercial de textiles, soluciones especializadas, insumos, químicos y maquinaria, líder en América Latina. Posicionada como el centro de negocios textiles más importante de la región, cuenta con una amplia oferta que la hace imperdible para abastecer la cadena de producción…

Y sí. Eso es. Un centro de negocios; una feria textil.

El enfoque claro y específico de la feria se ha establecido con el paso de los años. Hasta hace unos 15 años había pasarelas como en cualquier semana de la moda, pero hoy éstas no son sino aludidas por cortos “FashMobs” (o mini-pasarelas) del país invitado. Quitando las pasarelas se le intentó quitar el componente de “moda” a la feria y convertirla en algo más amplio, que abarque a la industria “textil” en su totalidad… aunque no podemos olvidar que, querámoslo o no, las dos siempre van a estar relacionadas.

Para Inexmoda, la relación intrínseca entre “sistema moda” e “industria textil” parece clara. A pesar de ser una feria textil, Colombiatex cuenta con una serie de eventos y exposiciones enfocadas a educar a los asistentes sobre la situación actual de la industria y las proyecciones hacia el futuro, incluidas las tendencias que se esperan.

Colombiatex 2018 Pabellón del Conocimiento Inexmoda UPB

Aunque tiene más manifestaciones, este aspecto más académico de la feria se concentra en el “Pabellón del Conocimiento”, organizado en alianza con la Universidad Pontificia Bolivariana. Dada la naturaleza de Colombiatex, es de esperarse la orientación de las conferencias hacia estudios de la situación de la industria y las tendencias que se esperan para las próximas temporadas. Pero parece casi un evento totalmente distinto y separado de la feria. ¿Cuántos de los estudiantes que asisten a las conferencias van también a la feria a empaparse de lo que podría ser su futuro profesional? ¿Cuántos textileros van a aprender y aprovechar los recursos que ofrece la feria? Y de los pocos – porque son pocos, en comparación con los asistentes a la feria – que van al Pabellón del Conocimiento, ¿cuántos se preocupan por entender temas distintos a las tendencias y el mercadeo digital que tanto alaban? ¿Cuántos de se preocupan, por ejemplo, por formarse para crear una industria más sostenible?

Algo parecido sucede con el llamado “Denim Day”, que celebra la feria desde hace ya cinco años. Con este día, Inexmoda pretende celebrar u homenajear al tejido que, según ellos, es revolucionario por su versatilidad y ha logrado reinvertarse – ¿no será más bien que hemos logrado nosotros reinventarlo? – para que continúe vigente en distintos momentos de nuestra vida y nuestra historia. El equipo de comunicaciones envía correos electrónicos recordando a los asistentes de usar prendas hechas con tejidos de denim en el famoso “Denim Day”, acompañados de invitaciones por redes sociales y los altavoces en la feria.

Colombiatex 2018 Pabellón del Conocimiento Inexmoda UPB

Pero siempre me quedó la duda de cuál es el verdadero punto de este día. De los expositores que asisten a la feria, me atrevo a decir que cerca de la mitad ofrecen este tejido en alguna forma. Y no cabe duda de que se ha convertido en una prenda del diario vivir, después de que en un comienzo sólo lo usaban trabajadores de fábricas como uniforme para soportar el trabajo pesado. Pero… ¿por qué hay que celebrarlo? ¿Qué quiere hacer Inexmoda al homenajearlo? Son preguntas que no tienen respuesta pero que, creo yo, generarían una mayor y más consciente respuesta del público si se respondieran junto al llamado de ponerse jeans en este día… y una educación sobre la historia del denim más allá de la infografía que no muchos vimos también sería ideal.

Con todo y sus fallas, debo decir que Colombiatex es una gran feria y que algunas las cosas que en ella se encuentran son interesantísimas. El Pabellón del Conocimiento es una iniciativa genial para intentar conectar la academia con la industria de la moda—un vacío que causa malestar a nivel global—. Pero además de crear los espacios para unirlas, necesitamos lograr una mayor participación. Necesitamos aprender a aprovechar los espacios de interacción entre los varios componentes del sistema de la moda. Sólo así lograremos avanzar verdaderamente hacia un sistema más completo, más coherente y menos superficial.

 

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